The Raven Boys: Los saqueadores de sueños

Todo el mundo tiene secretos. Los guardamos o nos los guardan, los controlamos o escapan a nuestro control. Ronan Lynch también. El gran secreto de Ronan es que puede coger cosas de los sueños y traerlas al mundo real. Lo malo es que hay alguien más que desea esas mismas cosas. Alguien cuyas intenciones son más siniestras. Y mientras tanto, las líneas ley que rodean Cabeswater se están debilitando. Glendower es un sueño cada vez más lejanos, y Gansey no está dipuesto a permanecer indiferente.

Después de leer la primera parte de esta saga con el club de lectura Oasis literario, salió esta lectura para continuar con la saga, pensando que nos iba a seguir enganchando, pero lo único que ha hecho ha sido desilusionarnos y que no queramos continuar con la saga.



Uno de los motivos por los que no nos ha terminado de convencer esta historia es que, en lugar de centrarse en lo importante de la trama con la búsqueda del antiguo rey irlandés, nos encontramos con que la historia se centra básicamente en Ronan y su capacidad de coger cosas de los sueños.

De los demás personajes, y de la importancia que puedan tener para la trama no hemos visto nada que nos mantengan pegados a las páginas de los siguientes libros. Además, la narración de la autora se nos ha hecho lenta y tediosa, de manera que nos invitaba aún menos, si cabe, a querer continuar con el libro.

En general nos ha parecido que, en este segundo libro, los personajes están faltos de construcción y que las interacciones entre ellos no dan los frutos que la autora busca. Además de que no nos gustan los triángulos amorosos y, de alguna manera, Maggie Stiefvater nos ha regalado uno que no tiene relevancia a lo largo de la trama.

Por lo que, después de que nos costara acabar este libro, no vamos a continuar con la saga, ya que preferimos dedicarnos a lecturas que sí nos atrapen y nos ayuden a pasar un rato más ameno.