Infección

George Wilson, residente de tercer año de radiología, despierta una mañana junto al cadáver de Kasey, su prometida. No tardará en averiguar que la joven, diabética desde niña, había participado en una serie de pruebas de una nueva aplicación que está a punto de salir al mercado. Bautizada como iDoc, y destinada a revolucionar la medicina del futuro, dicha aplicación aportará al móvil la capacidad de diagnosticar y tratar cualquier enfermedad. Es decir, optimizar resultados, reducir costes y, en definitiva, reemplazar a los médicos.Al fallecimiento de Kasey se sucede el de otros pacientes sometidos a la misma batería de pruebas. Ante este descubrimiento, George decide violar la normativa del hospital, y acceder a los últimos estudios que le habían realizado a su novia. Finalmente descubre que Kasey padecía cáncer de ovarios en fase avanzada, y llega entonces a una conclusión aterradora: alguien está manipulando los datos que maneja el iDoc, y las consecuencias pueden ser terribles para millones de usuarios. Averiguar la verdad que se esconde tras esta novedosa aplicación podría poner en peligro hasta su propia vida.

Este libro nos ha parecido muy entretenido, ya que cuenta con un hilo narrativo completamente adictivo, cuya lectura resulta muy ágil y agradable.

Infección describe un hipotético (aunque en absoluto surrealista) paradigma, en el que el diagnóstico de cualquier tipo de patología ya no es realizado por un médico, sino por una simple aplicación para móvil, que a través de una sofisticada red de sensores instalada en el dispositivo móvil del usuario, es capaz desde monitorizar en tiempo real su tensión arterial, pasando por realizar todo tipo de análisis clínicos, hasta incluso administrar la dosis adecuada de determinados fármacos, previamente almacenados en un depósito colocado de forma subcutánea mediante una sencilla operación quirúrgica.

En resumen, nos hemos encontrado con un thriller exquisito, en el que se dan cita diversas teorías de la conspiración, compañías de seguros, empresarios, médicos, abogados, mercenarios, jueces, leyes sanitarias, decisiones efectuadas por algoritmos informáticos basados en métodos heurísticos… Todo ello utilizando un vocabulario sencillo, toda vez que elegante. El único aspecto negativo que hemos apreciado (y es perfectamente perdonable), es que, si bien el autor es licenciado en medicina, y por ende su estilo de narración es inmejorable en cuanto a términos médicos se refiere, a nivel tecnológico, encontramos que el autor podría haber realizado un poco más de trabajo de investigación… El fragmento en el que describe la carga de una batería en tan solo 1 segundo ha sido demasiado para nuestros ojos, y aún nos escuecen un poco J. El resto, matrícula de honor. Altamente recomendable.

Reseña hecha por Gamusino Gañán.