El intercambio





Cuando Caroline y Francis reciben una oferta para intercambiar su casa no lo dudan. Se están esforzando en recomponer su matrimonio y una semana a solas puede ser justo lo que necesitan.
Al abrir la puerta se encuentran con un lugar algo siniestro y casi vacío. Resulta difícil imaginar quién podría vivir allí. Sin embargo, gradualmente, Caroline comienza a descubrir algunos rastros de vida..., de su propia vida.
Las flores del baño o la elección de los CD de música podrían parecer inocentes a los ojos de su marido, pero para ella son justo lo contrario: son pistas. Es como si la persona con la que han intercambiado vivienda fuera alguien a quien ella conoce, alguien a quien quiere olvidar.
Pero esa persona está ahora en su casa...

Antes de nada, desde Mundo Gamusino queremos agradecer a Suma de letras la colaboración con el blog y el envío del ejemplar para su reseña. Desde que vimos la nota de prensa nos ha llamado mucho la atención, y la verdad es que no nos ha defraudado en absoluto.



La trama se relata en forma de flashbacks, de manera que la protagonista, Caroline, nos va a contar sus experiencias en el presente, y lo que ha pasado unos años antes. También nos vamos a encontrar con algún que otro capítulo en el que Francis nos cuente lo que siente y como se adapta a los cambios.

También nos vamos a encontrar con unos cuantos capítulos un tanto perturbadores que nos van a ayudar a comprender aún mejor la historia, o no, ya que nosotros le hemos encontrado sentido a esos capítulos cuando quedaban cien páginas para el final. Pero hemos visto eso como un instrumento de la autora para engancharnos aún más a sus páginas.

Nos ha gustado mucho la manera que ha tenido la autora de mantener el ritmo de la trama, consiguiendo que nuestro (casi) único interés fuera seguir avanzando con el libro. Pero nos ha gustado incluso aún más que ha dejado el pastel fuerte para el final. Nos referimos a que fue a partir de la página trescientos cincuenta aproximadamente cuando la tensión de la historia ha subido exponencialmente, consiguiendo que nuestro cuerpo reaccionara con cierta angustia debido a la necesidad de saber qué es lo que iba a pasar.

La evolución de los personajes es completamente palpable en cada capítulo del libro. Nos ha gustado mucho como ha manejado la situación Caroline, la protagonista. Pero también tenemos que reconocer  el desarrollo del personaje de Carl, ya que, aunque durante un tiempo parece un personaje bastante plano, es capaz de adaptarse cual camaleón a los requerimientos del guión.

Realmente es un thriller que aconsejamos a cualquier amante del género. Y queremos lanzaros una pregunta: ¿vosotros participarías en un intercambio de casas? Nuestra respuesta la conoceréis cuando terminéis el libro.

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