La sinfonía del unicornio

¿Habéis oído hablar del unicornio blanco y su cuerno espiralado? ¿Del dragón que surca los cielos y respira fuego? ¿Y qué hay del astuto zorro de nueve colas? ¿O del ave en llamas que renace de sus propias cenizas? ¿O el espíritu en forma de caballo que habita en las lagunas?

En Estarella, tales criaturas son mucho más que una fábula. Existen. Son seres mágicos que rondan a su antojo. Algunos habitan en bosques, y otros en las cimas de las montañas o la profundidad de cavernas secretas. Cruzarse en el camino de una de estas poderosas criaturas puede resultar en un don mágico o en un final fatal. 

Kass, la princesa de la familia real de Snoara, lleva la marca del unicornio; su boda con el príncipe Lim es la única manera de proteger su futuro y asegurar el bienestar de su reino. Una unión que es interrumpida cuando el rey Landis Ashburn, conocido como el dragón de Inferness, decide secuestrarla y cambiar así su destino. 

Tal evento desencadena consecuencias inesperadas para cada uno de los hermanos de Kass: la reina Farah desaparece sin dejar rastro; Everlen abandona la seguridad del castillo con una misión inesperada y una aliada inusual, y Keven se ve forzado a aceptar un rol de liderazgo para el que no está preparado. 

En esta odisea, la realidad se vuelve engañosa, nadie está donde debiera estar, y todos corren peligro. 

Este libro nos llamó mucho la atención por su portada, y su sinopsis nos terminó de convencer, pero la historia que esconden sus páginas nos ha resultado entretenida, sin llegar a convencernos del todo. A pesar de ello, queremos leer la segunda parte para ver cómo termina. 

La ambientación de esta novela nos ha gustado mucho. Es, sin duda, uno de los pilares que nos ha mantenido enganchados a esta trama porque, en su transcurso, tenemos que pasar por diferentes países, y cada uno de ellos es muy diferente al anterior, y merece la pena descubrirlos. 

En cuanto a los personajes, hay varios que son interesantes.  Primero conocemos a Kass, la joven princesa de Snoara que va a casarse en breve. Es un personaje muy bien construido y con alguna que otra sorpresa. Keven es su hermano mellizo, un personaje que, a pesar de las circunstancias, tiene mucho que decir. 

Farah es la hermana mayor de Kass y Keven, y reina de Snoara tras la prematura muerte de sus padres. Es un personaje con mucha entereza y carisma, además de muy entregada a su familia. 

Everlen es, quizás, el hermano que más nos ha sorprendido de toda la familia real de Snoara. Es un personaje que esconde una gran determinación, a pesar de dar la impresión de centrarse solo en su música y sus libros. 

Al príncipe Lim no lo vamos a conocer en profundidad todavía, pero creemos que en la segunda parte tiene aún mucho más que decir. 

Landis Ashburn es un personaje que nos ha dejado entrever cómo es desde el principio, de manera que su evolución no nos ha sorprendido en demasía, aunque nos ha gustado leerla igualmente. 

En cuanto a la trama en sí, pensamos que esta historia se podría haber contado entera en un solo libro, y al haberla hecho en dos, puede que haya partes un pelín lentas, pero nada que dificulte la lectura.